Moguer se volcó ayer con su Patrona en el Día Grande de la Velada

Con la solemne Función Principal de la Hdad. Matriz de Montemayor en una abarrotada iglesia parroquial y la multitudinaria procesión de la Patrona de Moguer por una ciudad entregada a la devoción a su Virgen, Ntra. Sra. de Montemayor Coronada fue ayer la gran protagonista de una intensa jornada que nos deparó imágenes imborrables.

El pueblo se despertó a los sones de la Banda de Música Hnos. Niño que con su diana floreada anunciaba el gran día de la Patrona. La Virgen presidió poco más tarde desde el altar mayor de una parroquia verdaderamente repleta de fieles, la Función Principal de la Hdad. Matriz de Montemayor que se convirtió en una nueva muestra del profundo amor que Moguer profesa a su Patrona.

El acto religioso oficiado por el párroco José A. Omist y el vicario parroquial José D. Ramírez, contó con el complemento musical de la Coral Polifónica del Liceo de la Música de Moguer, que estrenó en su repertorio una pieza dedicada a la Virgen de Montemayor compuesta por su director, Pablo Martínez. En el transcurso de la Función el párroco bendijo el agua bautismal de un antiguo baptisterio restaurado y recuperado para impartir el sacramento.

Finalizado el solemne oficio al que asistieron representantes de todas las hermandades de la ciudad, de las filiales de Montemayor, de hermandades de pueblos cercanos y una representación de autoridades encabezada por el alcalde de la ciudad, Gustavo Cuéllar, el Ayuntamiento ofreció su tradicional recepción a la sociedad moguereña en el claustro de San Francisco.

Moguer vivía desde primera hora el día grande de sus fiestas patronales, pero el gran acontecimiento que desbordó por sus calles y plazas el ancestral cariño que los moguereños tienen por su madre fue sin duda la Magna Procesión de Ntra. Sra. de Montemayor Coronada, escoltada por miles de personas, vestidas como toda la ciudad de fiesta grande.

Las muestras de amor a la Patrona se fueron sucediendo a lo largo de un recorrido que vivió momentos especialmente emotivos al paso de la imagen por el convento de sus camaristas de honor, las Hermanas de la Cruz, algo que sucede cada 5 años, o del propio ayuntamiento donde toda la Corporación saludó a la que también es Alcaldesa Perpetua de Moguer.