Ecologistas exige “medidas efectivas” para la recuperación de la playa de Matalascañas

Ecologistas en Acción ha exigido que las medidas para la recuperación de la playa de Matalascañas sean “efectivas a largo plazo”.

Por ello, los ecologistas han explicado en un comunicado que han alegado al proyecto de regeneración de la playa de Matalascañas usando los argumentos del Estudio de Impacto Ambiental (EIA).

Así, han afirmado que “la costa de Matalascañas seguirá sometida a un proceso erosivo en el futuro derivado de diferentes factores, como son: la onda erosiva procedente del Norte, tras la construcción del dique de encauzamiento Juan Carlos I del puerto de Huelva, la progresiva sobreelevación del nivel medio del mar y la invasión de la playa por las edificaciones, que continuará afectando a la estabilidad del perfil de playa”.

Ante estas “contundentes conclusiones” que definen “el origen del problema”, el proyecto propuesto hace “caso omiso a su propio diagnóstico y plantea una solución puntual y limitada a la zona de playa urbana”, según agrega Ecologistas en Acción.

“A sabiendas de ello, y precisamente por no atajar ninguna de las causas expuestas, está abocada al fracaso, más allá de la política de imagen que pueda suponer”, han valorado los ecologistas.

Además, Ecologistas en Acción ha añadido que una de las consecuencias destacadas en el EIA es que “se constata la alteración de la dinámica litoral y que se están ocasionando graves impactos sobre los ecosistemas litorales del Espacio Natural de Doñana”.

Asimismo, ha agregado que “prevé pérdidas medias de medio metro del acantilado del Asperillo al año, elemento geológico declarado Monumento Natural”. “De allí salen entre 100 y 200.000 metros cúbicos de sedimentos anuales que van a nutrir en parte el sistema de dunas vivas del Parque Nacional”, ha explicado.

Igualmente, los ecologistas han asegurado que “se está provocando una tremenda transformación del área con regresión del acantilado por un lado y aportes de arenas al sistema de dunas móviles por otro, que incrementan los procesos de colmatación de la marisma en la zona de la retuerta”.

En las alegaciones se incide en que, dado que “no es viable actuar desde un proyecto local en la causa mayor de la progresiva sobreelevación del nivel del mar, sólo queda, para ser consecuente”, plantear la necesidad de actuar sobre “las otras dos causas expuestas como determinantes en el estudio y que serían la eliminación del dique de encauzamiento Juan Carlos I y recuperar, al menos, la zona de dominio público de la playa urbana para su regeneración como espacio de amortiguación”. “Sólo estas dos soluciones serían consecuentes”, aseguran.

Así estaría justificada, a juicio de Ecologistas en Acción, la intervención de la administración “en pro del bien común que pasa tanto por preservar un tramo de playa urbana, como mínimo en el medio plazo, como por incluir la recuperación de los espacios naturales que la contienen y a los que tantos impactos viene originando desde su construcción”.

“Sobre los aportes de arena se señala que las aportaciones de sedimentos de fondos marinos presentan una heterogeneidad que no se corresponde con las arenas originales de las que hacían gala estas playas, por tanto, el aporte de estos sedimentos haría un flaco favor a Matalascañas al perder uno de sus valores más característicos y diferenciadores”, ha señalado Ecologistas en Acción.

En el estudio se recoge que los sedimentos a aportar presentan concentraciones en elementos altamente tóxicos como el mercurio, que superan en un 50 por ciento las recomendaciones. Le quitan importancia porque la playa de destino tiene una contaminación aún mayor. En cualquier caso, “se deberían plantear la descontaminación de ésta en lugar de seguir aportando sedimentos contaminados por encima de lo aconsejado”.

“Constatada la magnitud de los efectos de alteración de la dinámica litoral pensar en una actuación puntual sin relación con las causas de fondo, que el propio estudio reconoce, merece poca consideración, más allá de una operación cosmética de cara a la temporada de verano, que se podría ahorrar al tratarse de dineros públicos”, ha defendido Ecologistas en Acción.

Por último, Ecologistas en Acción trasladará el informe del estudio de Impacto Ambiental al Consejo de Participación de Doñana para su estudio, exigiendo “un pronunciamiento del mismo para que se adopten las medidas necesarias para revertir los efectos de la alteración de la deriva litoral que tantos perjuicios está ocasionando a Doñana en su conjunto”.