Ciudadanos destaca que el intercambiador de El Rocío fortalece el transporte público de viajeros en la provincia

El parlamentario de Ciudadanos (Cs) por Huelva y vicepresidente del Parlamento de Andalucía, Julio Díaz, ha valorado que “los presupuestos andaluces del Gobierno del cambio fortalecen el sistema de transporte público en la provincia de Huelva y, en particular, en un centro neurálgico, como es la aldea de El Rocío”, con la construcción de un intercambiador de autobuses “muy necesario para dar cobijo a los numerosos pasajeros que durante todo el año, y singularmente en torno a la romería, utilizan el servicio público de transporte”.

Díaz, que ha recordado que el pasado día 16 se firmó el convenio de ejecución entre la Junta de Andalucía y el Ayuntamiento de Almonte “para que se licite, adjudique y comience la ejecución antes de final de año, toda vez que el proyecto estará terminado esta primavera”, ha asegurado que “era muy necesario ante la cadencia de los servicios discrecionales y de los servicios de transporte públicos conveniados con la Junta de Andalucía, 20 diarios, para atender al intenso trasiego de trabajadores de las fincas aledañas y de las personas que acuden a la aldea durante la romería de la Virgen del Rocío o por las peregrinaciones extraordinarias de las hermandades filiales; además de la cantidad de turistas que llegan en sus propios autobuses”.

El parlamentario de la formación liberal ha detallado que el intercambiador se va a ejecutar al final de la avenida de la Canaliega, en una amplia parcela de 2.000 metros cuadrados propiedad de la Junta de Andalucía, con 450.000 euros de los presupuestos andaluces, “a los que algunos partidos votaron en contra”. “Su construcción va a ser sostenible y respetuosa con el entorno, para minimizar la huella ecológica”, ha abundado Díaz, que ha destacado que el edificio contará con un mirador, “desde donde se podrá admirar el santuario de la Virgen del Rocío y el Charco de la Boca”; además de una cubierta con césped en color marrón, en consonancia con las construcciones tradicionales de la aldea, las chozas; cuatro dársenas para los autobuses y una amplia zona de espera para los pasajeros.