Apenas pasaba media hora de las doce de la noche del miércoles, cuando la feria de Rociana daba el pistoletazo de salida. Una salva de cohetes y el encendido del alumbrado del recinto ferial, daban las señas a los rocianeros que comenzaban así a disfrutar de cinco días de diversión y de convivencia.
El inicio de la feria coincidía este año con la festividad del Patrón, San Bartolomé Apóstol, en cuyo honor se celebran estas fiestas en el mes de agosto. Una coincidencia que no ocurre todos los años, pero que ha permitido a los rocianeros disfrutar aún más si cabe del inicio de su feria.
Sin duda la de este año estará marcada por la austeridad, pero a pesar de la crisis, hay motivos para disfrutar de esta feria que no es sólo para los vecinos de Rociana, sino para visitantes de otros lugares.
Las sevillanas, el vino y la buena compañía estarán presentes hasta el próximo domingo, día en el que los rocianeros se despedirán de su Feria hasta el próximo año.