Que si, que estamos en verano, pero es que en el Condado es Rocío todo el año. Y si no que le pregunten a los niños y niñas de Chucena, que este fin de semana han celebrado su “pará” rociera, un “mini Rocío” que simula a la perfección la salida de la hermandad en la mañana del jueves.
Todo está perfectamente organizado. Han nombrado a su Hermana Mayor, Rocío, que sabe perfectamente cuál es su papel en esta pará rociera. Y también se ha aprendido la lección Fernando, el pequeño presidente, que se ha tomado esto como un ensayo de lo que quiere ser de mayor.
Hace ya casi diez años que se celebra este evento. El fin es inculcar en los pequeños la tradición y la fe rociera. Eso por un lado. Por otro, lo que se recauda en la barra servirá para sufragar los gastos de la hermandad.
Aperitivo en casa de la Hermana Mayor y, tras el recorrido de recogida hasta la Casa de Hermandad, actividades infantiles, concierto y barra a precios populares. Así ha sido un año más la pará rociera de Chucena.