El Sindicato de Enfermería (SATSE) de Huelva ha denunciado aumento de la presión asistencial en las urgencias del Hospital Juan Ramón Jiménez, tras la concentración de los servicios causados por la fusión hospitalaria puesta en marcha en el año 2015. En concreto, según los datos recopilados por SATSE, desde 2014, último año completo sin fusión hospitalaria, hasta 2016 se han incrementado en más de 17.000 las atenciones en Urgencias en el Juan Ramón Jiménez a pesar que la plantilla de enfermería sigue siendo prácticamente la misma, generando dificultades para garantizar la atención al usuario en condiciones de calidad y seguridad.
Así, entre otras consecuencias, la unificación de servicios y la fusión de los hospitales Infanta Elena y Juan Ramón Jiménez en el Complejo Hospitalario de Huelva, ha derivado en que las urgencias atendidas en el Juan Ramón Jiménez se incrementen considerablemente.
Así lo desvelan los datos de los indicadores de la actividad asistencial de los últimos años, los cuales reflejan que mientras en el año 2014 en el Hospital Juan Ramón Jiménez se atendían 113.612 urgencias, en 2016 dicha cifra ha pasado a 130.883, es decir son 17.271 urgencias más las atendidas en este centro hospitalario, lo que significa que se ha generado una concentración de usuarios en las urgencias del Juan Ramón Jiménez.
Con estos datos, subraya el Sindicato de Enfermería, la media de atenciones diarias en urgencias ha pasado de las 311,3 asistencias que se registraban en 2014 a las 359 asistencias de 2016. Además, se da la circunstancia que el porcentaje de ingresos se ha mantenido prácticamente igual, tanto en el Juan Ramón Jiménez como en el Infanta Elena, dejando en evidencia que el incremento en ningún caso responde a un mal uso del servicio por parte de los usuarios sino a una respuesta a los cambios organizativos derivados de la concentración de servicios en el Juan Ramón Jiménez.
SATSE alerta que esta situación, ya por sí misma, genera sobrecarga asistencial y laboral en los profesionales del hospital Juan Ramón Jiménez, más aún cuando la labor diaria se desarrolla con una plantilla mínima, deficitaria y sometida a una gran presión asistencial. A modo de ejemplo, continúa explicando el Sindicato, para el Plan de Alta Frecuentación se ha incorporado a una enfermera y una auxiliar de enfermería por turno, pero ello realmente no se trata de un refuerzo tal y como asegura la Administración, pues ni si quiera dan para cubrir las bajas reglamentarias de la plantilla.
A lo que hay que sumar, el cierre de unas 50 camas por la falta de dotación de personal para atenderla, lo que todo ello está dando lugar a un hospital cada vez menos dotado de medios y personal y con menor capacidad de resolución de los problemas de salud de la ciudadanía.
De esta manera, el Sindicato de Enfermería demuestra, una vez más, que la fusión hospitalaria únicamente ha traído consigo consecuencias negativas, tanto para los profesionales que se han visto desbordados ante una mayor demanda asistencial y un déficit de plantilla, como es el caso de las urgencias del Juan Ramón Jiménez, como para los usuarios de la sanidad pública onubense, que tienen que sufrir demoras y una prestación de la atención sanitaria de menor calidad.