La Consejería de Sostenibilidad y Medio Ambiente ha logrado recientemente revalidar la certificación en gestión forestal sostenible en 60.433 hectáreas de monte público por medio de la auditoría externa a la que se ha sometido. Esta calificación la otorga la organización ‘Forest Stewardship Council’ (FSC), entidad sin ánimo de lucro de la que también forma parte como socia la Junta de Andalucía y que lleva más de 25 años dedicándose a promover la gestión forestal responsable en todo el mundo.
Esta certificación consta de dos fases: la certificación forestal sostenible, donde se acredita la gestión sostenible y, en segundo lugar, la certificación de la cadena de custodia de la madera en rollo, leña, biomasa, corcho y carne de caza de gestión que se obtienen de los aprovechamientos de estos montes.
Con este segundo paso, se certifica, por un lado, la trazabilidad del producto desde que sale del monte hasta que es entregado al comprador final y, por otro, que el origen de esos productos y su procesado ha sido siempre respetuoso con el medio ambiente.
Concretamente, los montes que han revalidado el sello FSC son Navahondona, Cerro de Hinojares, Calar de Juana y Acebadillas, Poyo de Santo Domingo, grupo de montes de Guadahornillos y Cerros del Pozo, todos en la provincia de Jaén, así como el grupo de montes de Jimena de la Frontera y El Aljibe, ambos en Cádiz, el de Las Navas, en Sevilla, y El Robledal y La Sauceda en Málaga.
Población integrada
El director general de Política Forestal y Biodiversidad de la Junta, Juan Ramón Pérez Valenzuela, ha explicado que “esta certificación también se caracteriza por promover la participación en la gestión forestal de las poblaciones locales de las áreas de influencia del monte en cuestión, a través de la realización de consultas y sugerencias. De esta manera, se logra integrar a la población en la conservación, mantenimiento y mejora de los valores naturales, sociales y económicos que alberga el monte”.
Asimismo, ha señalado que la gestión forestal sostenible tiene también la finalidad de “conservar la biodiversidad, la productividad, la capacidad de regeneración, la vitalidad y el potencial de cumplir, tanto ahora como en el futuro, importantes funciones ecológicas y sociales sin ocasionar perjuicio a otros sistemas”.
En esta línea, ha recordado la importancia de la planificación forestal para la persistencia de la masa, además de que los productos provenientes del monte con certificado de sostenibilidad y de trazabilidad “son cada vez más demandados por los consumidores, de ahí la importancia de la certificación, que valora el buen aprovechamiento que se hace de los recursos naturales por parte de la Junta de Andalucía”.