Propietarios de Matalascañas rechazan implantar la zona azul porque ‘no soluciona el problema ‘del aparcamiento

La Asociación de Propietarios de Matalascañas y presidentes de comunidades y varios administradores de fincas han decidido por unanimidad rechazar el proyecto para transformar 2.500 plazas de aparcamiento del núcleo costero en zona azul al considerar que esta medida ‘no es una solución para acabar con el problema del tráfico en Matalascañas, porque no aumenta las plazas sino que las reduce’.

Así lo decidieron en una asamblea celebrada este sábado en la Casa de la Cultura de la población en la que participaron medio centenar de representantes de vecinos, algo más de la mitad de la totalidad debido a que muchos ‘no pudieron asistir’ o ‘no se les ha podido localizar’, según ha explicado a Europa Press el presidente de la Asociación de Propietarios, Juan Gómez.

De este modo, los vecinos han expresado su ‘rechazo frontal’ a un proyecto que contempla imponer el aparcamiento de pago en ‘las dos primeras líneas de playa’ del núcleo costero, lo que según el representante de los propietarios sería ‘más de un tercio” de la totalidad de las zonas de estacionamiento existentes en Matalascañas.

Además, consideran que esta medida supone ‘seguir cargando de pagos a los propietarios’, que estarían obligados a abonar una cuota de entre ocho y diez euros al año por cada vehículo que posean sin que esta tasa suponga contar con una plaza reservada. ‘A pesar de pagar, si llegas a la playa a las 12,00 horas no vas a encontrar ni un hueco’, ha señalado Gómez.

El presidente de la Asociación ha señalado que este proyecto también puede tener incidencias negativas en la economía local de Matalascañas, porque ‘mucha gente se pensará el venir al tener que pagar cada rato por tener el coche aparcado’.

Finalmente, ha apuntado que la presentación que se hizo del proyecto este sábado a los propietarios fue ‘muy insuficiente’, puesto que no se detallaron cuestiones ‘esenciales’ como las tarifas, la forma de sacar tiques o el tiempo de validez de los mismos.

Por tanto, aunque todos los reunidos coincidieron en la necesidad de realizar una remodelación de los aparcamientos en el núcleo costero y a acabar con la doble fila, especialmente pronunciada durante el verano, consideran que este proyecto ‘no es una solución viable’ para el problema, recordando además que las plazas de párking se han visto reducidas en los últimos años con la implantación del carril bici o algunas zonas de pago.

Así, los vecinos han mostrado su intención de trasladar esta negativa al Ayuntamiento de Almonte, del que depende el núcleo costero, esperando que sea tenida en consideración y que haga ‘recapacitar’ a la corporación municipal, que según Gómez parece ‘muy decidida’ a adoptar esta medida.