La Virgen del Rocío viste de celeste inmaculado

El celeste cielo inunda en estos días la imagen de Nuestra Señora del Rocío. Desde el pasado 30 de noviembre, la Virgen luce en su Ermita preparada para festividad de la Inmaculada Concepción.

Han sido las hermanas camaristas quienes han tenido la labor de vestirla con el traje celeste, realizado por los hermanos Benítez en encargo de la Hermandad Matriz en 1986.

Además, la Virgen lleva el juego de ráfagas de punta de martillo, corona y media luna de plata, diseñada y donada por Joaquín Castilla, en 1965.
También las flores son protagonistas. En esta ocasión, en tonos empolvados, ramilletes de rosas, margaritas, peonías y gardenias rodean a la Virgen.

Las visitas de devotos y curiosos se suceden, en esta ocasión, admirados por el celeste inmaculado que representa la purísima concepción.