La Real y Antigua Hermandad de la Santa Cruz de Arriba de Villarrasa cancela sus fiestas en este 2020 y aplaza los cultos

La Junta de Gobierno de la Real y Antigua Hermandad de la Santa Cruz, Sagrados Corazones de Jesús y María y Ascensión del Señor al Cielo de Villarrasa ha anunciado la cancelación de sus cultos y fiestas en este año 2020. Dicha determinación se proclama “ante las incesantes consultas que por parte de sus hermanos estamos recibiendo, respecto a la situación actual, y con la máxima prudencia”.

De este modo, la Junta de esta corporación crucera suspende, ante la imposibilidad de garantizar las normas establecidas por la autoridad civil en lo referente a la concentración de personas, la celebración del solemne triduo a la Santa Cruz los días 20, 21 y 22 de mayo. Además, ha acordado no proclamar este año el XLII Acto Poético Cultural, así como el tradicional pregón a la Santa Cruz, ratificando como pregonero a Antonio Rodríguez Márquez para 2021.

Por otra parte, los arribeños no podrán celebrar los días 4, 5, 6 y 7 de junio las fiestas en honor de la Santa Cruz ni el acto más importante de la hermandad como es su función principal de Instituto. Sin embargo, el recorrido procesional que corresponde para este año de la Santa Cruz se mantendrá para el próximo 2021.

La Hermandad ha decidido posponer al mes de septiembre, coincidiendo con la festividad de la Exaltación de la Santa Cruz, los cultos solemnes en su honor, pero “siguiendo en todo momento las recomendaciones de las autoridades competentes y adaptándonos a las medidas que estén vigentes en su momento para la prevención de la salud pública”.

Por otro lado, se destinará una partida del presupuesto que tendría para fiestas, en ayuda alimentaria para quien tenga necesidad de ella.

La Real y Antigua Hermandad de la Santa Cruz de Arriba de Villarrasa quiere mandar un mensaje de ánimo a todos sus hermanos, pidiendo una oración por los afectados y los que luchan contra la enfermedad: “es el momento de hacer ver al mundo y a nosotros mismos que hemos entendido la Cruz como estandarte de salvación y que fuera de la Cruz no hay otra escalera para subir al cielo”, concluye el mismo.