El pleno de Bollullos se reunía en sesión ordinaria el pasado viernes y, aunque los primeros puntos eran meramente administrativos, la oposición comenzaba la cita reclamando el derecho a ser escuchados.
El mayor peso de la sesión recaía sobre las mociones presentadas por todos los partidos político, pero nunca se llegó a la votación de las mismas. La presidenta del pleno, Isabel Valdayo, decidía suspender el pleno tras el debate de los dos primeros puntos, alegando una falta de respeto hacia el portavoz de su partido. Así lo exponía él mismo, Sergio Rosado, en unas declaraciones públicas en la página de Facebook de Independientes por Bollullos. Rosado justificaba la suspensión de la sesión por la “falta de respeto del grupo socialista hacia la alcaldesa y el equipo de gobierno en su totalidad”.
La oposición al completo utilizaba la misma fórmula: un vídeo en las redes sociales, para explicar la situación vivida. Para ellos, el motivo era otro: el Equipo de Gobierno se enfrentaba a la votación de las mociones presentadas por la oposición con dos concejales menos. Rubén Rodríguez afirmaba que la presidenta había utilizado las salidas al baño de algunos concejales para “justificar lo injustificable”.
Antes de comenzar el pleno, ya la oposición mostraba su desconformidad con la actitud del Equipo de Gobierno ante las mociones.
Incluso Izquierda Unida y Recuperemos Bollullos destacaban haber sufrido la anulación de algunas de sus propuestas de moción.
De nuevo, el pleno ha sido terreno de disputas en Bollullos, y oposición y gobierno se enfrentan con argumentos dispares.