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La Filial del Rocío de Moguer inicia mañana su centenario camino

Más de 120 vehículos y 300 caballos componen la comitiva
La Hermandad de Nuestra Señora del Rocío de Moguer se pondrá en marcha un año más en la mañana del jueves para iniciar su centenario camino que la llevará al emocionado encuentro con la Blanca Paloma.

La Junta Directiva que preside Manolo Morales, inicia un nuevo ciclo de peregrinaciones tras su reelección en el cargo el pasado mes de junio, y lo hace con la satisfacción de haber contribuido, junto a los mayordomos 2011 y varias empresas locales, a la construcción del nuevo monolito y abrevadero que se inauguró hace unos meses en el paraje de Pino Gordo, lugar donde pernoctan desde hace siglos los rocieros moguereños en su camino hacia las marismas de Almonte

Los peregrinos están convocados a las 8 de la mañana en la plaza de la Coronación donde el párroco José Manuel Raposo oficiará la misa de romeros a la que seguirá el tradicional desfile de despedida por las calles de la localidad. Este año la cita se ha adelantado una hora, para que la llegada a Pino Gordo se realice un poco antes que en ediciones anteriores.

En cuanto al recorrido, debido a las obras de renovación del colector de la calle San Francisco que se ejecutan en estos momentos, el itinerario ha debido modificarse, de manera que al llegar al cruce de la calle Flores con San Francisco, la comitiva continuará por la calle Puntales hasta Cristal Amarillo, para llegar a la plaza de la Soledad tras recorrer las calles Virgen del Rocío y Divina Pastora. A partir de ese punto, se recupera el recorrido tradicional que llevará al Carretón con el Simpecado, tirado por los bueyes de la familia Cascarilla, a la puerta del edificio del Ayuntamiento, y luego al cruce de Hornos en dirección a la ermita de Montemayor.

Tras rezar una salve a los pies de la Patrona, los rocieros moguereños se adentrarán en las arenas de su centenario y hermoso camino, para arribar a mediodía al paraje del Milanillo, donde tendrá lugar el almuerzo. Sobre las 16 horas se pretende reiniciar la marcha de manera que la expedición llegue a Pino Gordo en torno a las 8 de la tarde, y se pueda disfrutar con comodidad de una de las noches más hermosas del año en la que la devoción a la Blanca Paloma, la alegría de los romeros, y una naturaleza verdaderamente excepcional, llenan de emociones el corazón de los peregrinos.
A las 8 de la mañana del viernes se oficiará la misa del alba, e inmediatamente después se pondrá en marcha la comitiva que arribará al rocío por Las Macetas sobre las 3 de la tarde.

SORTEO DE CARROS

El teatro Felipe Godínez acogió el pasado lunes el sorteo de carros con el que se organiza la expedición moguereña al Rocío. Presidido por el Hermano Mayor de la filial, Manolo Morales, el acto contó con la masiva asistencia de los rocieros de la ciudad, que este año se prevé que asistan a la romería de Pentecostés en mayor número que en ediciones anteriores. Así se repartieron una veintena de números para carros tradicionales, casi una treintena para manolas y charrets, más de 40 para tractores, y casi otro tanto para vehículos todoterreno, lo que eleva el número de vehículos de la expedición moguereña por encima de los 120, además de entre 300 y 400 caballos que también acompañan con sus vistosas estampas la peregrinación al Rocío del Simpecado de la Hermandad de Moguer.

MAYORDOMOS

Los mayordomos de la Hermandad Filial de Moguer para este año 2011 son Francisco Barrera y su esposa Encarna Cordero, un matrimonio de larga trayectoria rociera, que este año han asumido el importante compromiso que supone representar a los peregrinos moguereños.
Como es tradición, la noche antes de la partida de la filial de Moguer hacia el Rocío, el Carretón con el Simpecado se traslada desde su sede en la Plaza de la Iglesia a la casa de los Mayordomos, una tradición que se convierte de alguna manera, en la primera parada de la hermandad en su camino hacia la aldea almonteña. En esta ocasión la cita es en la zona del Monturrio, donde Francisco y Encarna ofrecerán a todos los asistentes una copa de vino.