Durante el mes de agosto, los habitantes que residan en Matalascañas encontrarán abiertas las instalaciones del Punto Limpio todos los días de la semana, salvo martes y jueves, en horario de 9:30 a 13:30 horas, con el fin de adecuarse a la necesidad de los particulares, que han de librarse de todo tipo de desechos. Se trata de un lugar acondicionado para la recepción y el acopio de residuos domésticos, tales como aceites, pinturas o barnices, equipos electrónicos obsoletos o una simple pila de botón. Del mismo modo, tubos fluorescentes, radiografías, muebles, ropa, restos de poda y pequeños escombros.
Para llegar a la instalación, hay que tomar la última rotonda del Paseo Doñana -la de los bocois-, a la derecha. Este Centro de Recogida Voluntaria de Residuos Especiales se encuentra en una parcela de 2.500 metros cuadrados. Está dotado de viales, áreas de carga y descarga, contenedores específicos para cada caso, oficina de control y cerramiento perimetral. Para aminorar el impacto visual del edificio, se le ha dotado de vegetación y pantallas verdes, completando una infraestructura de excelencia para el desarrollo de su función medioambiental.
El Punto Limpio de Matalascañas garantiza la recogida y el tratamiento adecuado de los residuos que generan los habitantes del núcleo costero. Se da prioridad a la recuperación, reciclado y valorización de estos restos frente a su eliminación en vertedero, implicando de paso a los ciudadanos en buenas prácticas ambientales.
Esta sede permite adaptar la gestión sobre residuos en el municipio conforme a lo establecido en las últimas directrices nacionales y de la Unión Europea, cuyos objetivos están basados en la reducción en origen, reciclaje y reutilización en general, así como en la adecuada gestión y tratamiento de las materias peligrosas. Es, por tanto, un elemento clave para elevar la imagen de Matalascañas, así como la calidad de vida de sus habitantes. Por todo ello, resulta imprescindible contar con la participación vecinal.