Alejandro Quintero González vivió en la noche de ayer un episodio lamentable de agresión por parte de la afición del RCD Espanyol al término del partido, que medía a los periquitos con el Villarreal CF.
El árbitro onubense se retiraba hacia los túneles de vestuario al término del choque, cuando desde la grada volaba una botella que impactaba en el pecho del colegiado.
El andaluz identificó rápidamente al agresor señalándolo y mostrando quién era la persona que lo había hecho.
El propio Quintero explicaba en el acta que “una vez finalizado el partido, encontrándonos en la entrada al túnel de vestuarios, se produce un lanzamiento de un vaso de plástico de tamaño medio y lleno de líquido hacia mi persona, impactando en mi pecho con fuerza”.
La grada del Espanyol vive un nuevo episodio polémico e indisciplinario, después de las bochornosas imágenes de hace dos temporadas cuando invadieron su propio campo en busca de los jugadores del FC Barcelona que celebran el título liguero de la 22 – 23.
Por su parte, el trencilla de Huelva debutó en Primera División en la primera jornada en el duelo que enfrentaba al RC Celta de Vigo con el Deportivo Alavés y, terminó con el triunfo de los celestes frente a su público en el Estadio de Balaídos.