Se ha celebrado un primer encuentro entre representantes de la Universidad Pablo de Olavide y el Ayuntamiento en la Casa Consistorial, con el objetivo de iniciar la auditoria comprometida en el programa electoral por el Partido Popular, ahora en el gobierno.
La moción para su puesta en marcha fue aprobada por unanimidad del resto de grupos en el pleno del mes de agosto. Han comparecido junto al alcalde, José Antonio Domínguez Iglesias, el vicedecano de la institución José Carlos Miranda, el auditor y docente en esta especialidad David Zayas, y el profesor de Económicas Juan Carlos Vázquez.
La auditoría revestirá un carácter triple, en las parcelas económico-administrativa, laboral y urbanística. La falta de medios económicos y humanos para llevarla a cabo con carácter interno, ha obligado a externalizar su realización.
Desde el equipo de gobierno se ha decidido contar con una entidad como la Universidad Pablo de Olavide, en el objetivo de que los resultados no puedan interpretarse como sesgados. La garantía de independencia de la auditoría es vital para apartarla de las acciones políticas que puedan derivarse, una vez se conozcan los resultados.
Según el alcalde, José Antonio Domínguez Iglesias, ‘los diferentes partidos estamos perfectamente legitimados para investigar y denunciar, pero ese no es el propósito de la auditoría. Sí lo es conocer cómo se han ido procedimentando los convenios urbanísticos, los diferentes concursos y los accesos a la función pública. Todo para alcanzar a saber cómo hemos llegado a esta situación de endeudamiento excesivo que padecemos’.
Finalmente, esas cargas financieras y de gastos corrientes han llevado a que el anterior equipo de gobierno impusiera los altísimos impuestos presentes en el municipio.
Los representantes de ambas instituciones han conversado acerca de cómo puede ordenarse y parcelarse el trabajo. ‘Se va a crear una Comisión para marcar esas pautas y cuáles son los objetivos y el alcance de los trabajos, ya que es preciso definir cuál es el coste que se va a invertir en las auditorías, que variará en función del grado de profundidad que se alcance’, ha detallado el alcalde almonteño.
Para el nuevo equipo de gobierno, resulta importante el tiempo que ya lleva transcurrido. ‘Queremos tener todos los pasos previos terminados antes de final de año, de manera que podamos asignar una partida en los presupuestos de 2012, al resultar imposible para este por la falta de recursos’.
‘La auditoría nos va a permitir disponer de la fotografía acerca de cómo estaban las cosas cuando llegamos el 11 de junio. Estamos trabajando desde entonces para solventar la herencia negativa que nos han dejado, y crear a partir de ahí bienestar y futuro para Almonte. Principalmente, una economía saneada que redunde en beneficio de los ciudadanos, bajando los impuestos y mejorando los recursos, un objetivo al que estoy seguro de que llegaremos’, ha finalizado el político almonteño.