Las primeras hermandades condales emprenden su caminar hacia las marismas

Los valverdeños comenzaban su misa de romeros, a las puertas de la ermita rociera, en torno a las 8:00 h. de la mañana. Una Lola Delgado, emocionada, daba los vivas ante el Simpecado ejerciendo, al fin, de su ansiado cargo de Hermana Mayor de la Romería 2015. Carretas, caballos y una emoción infinita guiaban, un año más, a la hermandad valverdeña que ostenta el número 23 de las filiales.

Las puertas del Ayuntamiento de la Plaza España acogía, también, a las 9:00 h., a la hermandad de Villarrasa. Tras la misa de romeros y la imposición de medallas a los nuevos hermanos, los rocieros comenzaban su caminar hacia la Virgen.

Del mismo modo Palos, salía hoy hasta la aldea almonteña tras la función de romeros. La filial número 37, que peregrina desde 1970, se encuentra, también ya, en los caminos.

También Almonte ha despedido hoy a su Matriz. La Hermandad de Nuestra Señora del Rocío llegará esta noche a la aldea. Allí hará los honores a todas las filiales (116 en esta ocasión) que llegarán hasta los pies de la Blanca Paloma para compartir con los almonteños estos intensos días de romería.

La Hermandad de Lucena del Puerto, pueblo de arraigada tradición rociera, igualmente partía hoy, tras la misa en la parroquia de San Vicente, hacia las marismas. La hermandad, que carece de Hermano Mayor este año, ha abierto, una vez más, los festejos con intensidad, devoción e infinito fervor hacia la reina de las marismas.