La crisis ha hecho estragos en la sociedad que, de un día para otro, se ha visto sin trabajo y con pocas oportunidades para recuperarlo. Sin embargo, existe un grupo de personas que decidieron salir de sus casas y, en vez de quedarse en el sofá esperando un empleo caído del cielo, buscaron una alternativa al desempleo. Es el caso de los emprendedores. Y precisamente premiar esta actitud es lo que se ha hecho en el Centro de Apoyo al Desarrollo Empresarial de Bonares.
En total, unas 40 personas o empresas emprendedoras han sido las condecoradas. Una iniciativa que supone el empujón motivador necesario para que el número de emprendedores no haga más que crecer.
La jornada ha servido también para poner en valor la importancia que juegan las PYMES y el sector servicios en la economía española, así como para identificar a las misma como la gran esperanza de la salvación del país.