La comunidad educativa de Minas de Riotinto y el ayuntamiento contra el cierre de una línea de Infantil

El Ayuntamiento de Minas de Riotinto con su alcaldesa Rosa Caballero a la cabeza y la concejala de Educación Fátima Fernández entre otros miembros del equipo de Gobierno se han manifestado junto a los padres y madres de los niños de Infantil del CEIP Virgen del Rosario de Minas de Río Tinto tras conocer que la delegación territorial de Educación quiere eliminar una línea de tercero de Educación Infantil para el curso 2017-2018 ya que tras finalizar el proceso de matriculación, se han alcanzado solo 27 alumnos.

Los padres y madres se han visto sorprendidos con el final de curso encima y han salido a la calle para oponerse a esta decisión de la delegación territorial de la Consejería de Educación de la Junta de Andalucía, ya que esta cifra supera la ratio de escolares por curso, que según la normativa es de 25 estudiantes, estimando un espacio de 2m² por niño, teniendo estas clases 50 metros cuadrados.

La alcaldesa, Rosa Caballero, ha aseverado que “no ha sido una decisión de última hora”, ya que el año pasado “también hubo problemas con una línea de infantil” y se propuso “unir las dos líneas de los niños de 4 años”, que son los que se encuentran actualmente afectados. Caballero ha afirmado que desde el año pasado “ya estaba la amenaza en ciernes de unir las dos líneas y finalmente se ha llevado a cabo” y ha denunciado que lo que se persigue es “recortar el sueldo de una maestra, anunciándolo cuando uno no tiene capacidad de reacción, al final de curso”.

“Se ve claramente que los niños no tienen sitio para sentarse porque están hacinados”, ha afirmado la regidora municipal, añadiendo que ella misma como profesora que es “no sería capaz de trabajar así, máxime cuando es un aula en donde no hay aire acondicionado”. La alcaldesa ha reflexionado sobre el hecho de que se recorte en materia de Educación: “es cierto que en época de crisis hay que apretarse el cinturón, pero hay otras áreas en las que reducir y que no afecten a la calidad de la educación”. Caballero ha apuntado que “lo sensato es dejar las cosas como están porque funciona bien”, ya que las aulas “no están creadas para albergar a tal cantidad de niños en condiciones dignas”.

Cuerpo directivo, docente y padres y madres unidos
Esta medida, se encuentra “fuera de la ley porque la normativa permite 25 niños por clase y supera los metros cuadrados ya que “se estima que sean unos 2m² por niño aproximadamente, con lo que en estas clases de 50 metros los 27 niños no caben”, explicó Beatriz Márquez, portavoz de las madres y padres cuyos hijos están afectados por esta medida.
Mientras hay otros cursos que mantienen las dos líneas con 26 alumnos, como 3º de infantil, ésta que pasaría a ser 1º de Primaria y tiene un escolar más pasa a unificarse, lo que para Beatriz Caballero le resulta “muy extraño”. Si se permite esta situación, “será un recorte en profesorado que continuará ya así, perdiendo incluso el profesor de apoyo, lo que va a acarrear una merma en la calidad educativa que se imparte en este pueblo y una discriminación respecto a otros centros de otros lugares y otras líneas del propio colegio”, lamentó esta madre.

Desde los padres y madres del centro se han llevado a cabo una recogida de firmas, consiguiendo presentar en la Delegación 891 rúbricas. Además, han solicitado una entrevista con el delegado de Educación, Vicente Zarza, y con el Jefe de Escolarización y de Planificación de Huelva, Antonio Abad, con el que van a reunirse la semana que viene.
La maestra del centro y una de las perjudicadas por esta medida, Mercedes de los Santos, ha asegurado que “no hay clases de más de 25 alumnos y que estos cursos están desdoblados desde los dos años, por lo que no entendemos el porqué de hacerlo ahora”.

La comunión del cuerpo docente con las familias es plena: “La dirección del centro opina igual y no hay ninguna división sobre este tema ya que son muchos niños y, a estas edades, requieren la máxima atención”. Esta profesora ha aclarado que se permiten escolarizaciones “de última hora o a mediados de curso, por lo que la media por clase puede aumentar si se dan determinadas circunstancias pero no se puede permitir llegar a esas cifras desde el principio del curso”, ya que -aclara- debido a los traslados de trabajadores de la mina cercana se puede provocar que se supere “ampliamente los 30 alumnos por clase una vez comenzado el curso lo que sería un verdadero despropósito para el único colegio de la localidad”.

El CEIP Virgen del Rosario es un centro de difícil desempeño o de compensatoria, donde se encuentran menores con necesidades especiales y existen bastantes familias desestructuradas que necesitan un apoyo extra en la educación. También, es el único centro con infantil de la localidad y la escolarización no es fija por la situación laboral que rodea al municipio, ya que hay mucha población itinerante por el trabajo en la mina.