El pileño Antonio Bernal y sus bueyes volvieron, un año más, a acompañar el simpecado de san Isidro Labrador, por las calles de Escacena, hasta su llegada a Tejada.
Muchos vecinos, devotos de la Hermandad y foráneos al municipio, los que se dieron cita, el pasado viernes en la localidad onubense.
Llegado mayo, los escaceneros festejan los cultos de San Isidro, una vez finaliza la campaña de la siembra.
La entrega floral a las puertas del Ayuntamiento y la capilla del Nazareno, fueron algunos de los puntos de interés del recorrido del romero.
Una celebración, que este año ha contado con la participación de la joven Heramana Mayor, Marta Tirado.
Sin duda, San Isidro ha llenado de color, sentimiento y fiesta, como viene siendo habitual desde el año 58, las calles de Escacena.